jueves, 18 de junio de 2009

"NOSTALGIA DE SERGIO"

La prolongada ausencia del amigo Boggio no ha hecho más que acrecentar el sentimiento que expresa el título: nostalgia. A modo de humilde homenaje abordo la difícil crónica del pasado domingo en clave cinematográfica, como tributo a su quijotesca figura.
En la previa al match este cronista evocaba dos efemérides acaecidas en 14 de junio: la rendición de las tropas argentinas en Malvinas y el fallecimiento de Borges en Ginebra. Nada hacía suponer que un tercer hecho se agregaría a la lista de infaustos recuerdos. Empecemos con el recorrido fìlmico para calificar lo sucedido como "Ocean`s eleven" ó, si se prefiere, "La gran estafa". Un jugador de hercúlea figura solicitó se tuviera en cuenta su disminuída situación física a la hora de la conformación de los equipos. Un confiado hermano lo rodeò de jugadores dotados para que se sintiera contenido. A poco de empezar, la "fiebre" acusada por aquél dió paso a un volcán que escupía goles, jugadas y recuperos de balòn notables en cada centímetro del césped de Ocampo. Cada tanto un instinto pudoroso lo hacía pronunciar un desvaído "ay". El partido no tuvo equivalencias y por tanto no ahondaremos en su desarrollo.
En el tercer tiempo, un transpirado Pedro decía: "Fue un robo". "No", contestaba el Nono, "tenés la sensación de que fué un robo, pero las estadísticas demuestran lo contrario". "Tenemos que dejarnos de robar por dos años", agregaba un arrepentido simpatizante funebrero que reside en tierras cariocas.

Calificaciòn

"Perdidos en la noche"

Nando "Atrapado sin salida" Soria. Al igual que Jack Nicholson en el film homónimo, ingresó a Ocampo en pleno uso de sus facultades y se retiró trastornado. Alternó el arco con la defensa. Sumaremos los puntos obtenidos en ambas posiciones para darle un más que generoso 3.

Calo "Titanic" Calderòn. Buscó salvar del naufragio lo que se pudo, que fuè bien poco. Los salvavidas no alcanzaban para todos y el renunció al suyo para sufrir estoicamente en el arco. 4 puntos.

Bocha "La zona muerta" Sànchez. Desperdiciò tres oportunidades de gol bajo los palos y con el arquero en otra parte. Fueron proféticas sus palabras durante el precalentamiento: "¡que pesado estoy!". 3,50 puntos y el premio "Bud Spencer" para él.

Antonio "Zatoichi". El célebre personaje de Kitano reunía cuatro características: era un temible guerrero, era también ciego, rubio y masajista. Si bien al comienzo pareció afirmarse en el aspecto marcial, con goles importantes, poco a poco fué migrando hacia una ceguera precoz y un masajeo improductivo de la pelota. Fuentes que merecen nuestra mayor confianza nos aseguran que tras el cotejo tiñó su pelo de color flúo, siendo esta la real causa de su ausencia al trabajo. 4 puntos.

Alejandro "Do the right thing" Quiroga. Se abocó a jugar y a revertir la fortuna pero, sin socios para construir el juego ni profesionales que entendieran a dónde estaba marcando los pases, se fuè hundiendo en la intrascendencia. 5 puntos.

"Los sospechosos de siempre"

Nono "Pecados capitales" Benítez. Un silencio casi mafioso en los momentos en que el partido requería cambios. Una tarea sobria en el arco y en las proyecciones. 7 puntos.

Martìn "Diarios de motocicleta" Cigorraga. Mucho predicò la revolución y sin embargo lo vimos incorporarse sin titubeos a la máquina de opresión de un equipo sobre el otro. 7 puntos.

Sebastián "Tora, Tora, Tora". El ataque fanático como estandarte para hundir a la flota enemiga (entendiéndose por flota todo miembro inferior de los jugadores del equipo contrario). Jugador noble. 6,50 puntos.

Carlitos "Sueños de seductor" Sànchez. Se lo vió en muy buen nivel. Corrió, jugó, hizo goles. 8 puntos.

Ale "Robó, huyó y lo pescaron" Soria. Quizás su mejor partido en el año. Oscar al mejor actor protagónico. 9,25 puntos.


El epílogo nos entregó imágenes varias: en una silla Pedro iniciaba un interminable "call". Detràs de la barra Jorge festejaba el triunfo de la Academia y aumentaba el precio de la "Stella Artois".De este lado, Carlitos retrataba para la posteridad a los "players". Por encima de todo, el dúo Nono-Ale desplegaba una pancarta que rezaba: "Nosotros hacemos".



Autor: Nando