Y la seguimos Jorge, qué tanto. Notamos que De la Sota se impone con comodidad en Córdoba y en una semana inauguraremos las falsas Primarias en todo el territorio nacional. ¡Qué si ya tengo el voto decidido? Sí, se llama Hermes. Pero como es costumbre, iré con tijerita.
No, ya le dije que eso se lo menciona a Fernando personalmente. No intente aprovechar el espacio que no le compete.
Sí, el feca es de primera. Se agradece.
Como usted sabe, este domingo renovamos la sana devoción por el balón. El tema es que se anotaron 10, no pudieron venir los jóvenes Rodrigo, ni Simón. Teníamos de baja a un diplomático de guardia, pero otro se anoto y nos COLGÓ.
Tarjeta roja furiosa para Carlos Catella.
Por lo tanto, fuimos 9 miembros en la contienda, aún ilusionados con la aparición del faltante.
Como para mover las piernas, se armó un 4-5 que tomaría un matiz definitivo.
Azules con Nono, Sergio, Quiroga y el Loco.
Rojos con Nando, Calo, Fabián, Ariel y Ale S.
En este cotejo destacamos con brío la contundencia y la técnica de los Azules.
¡Un violín, Jorge!
Nono como arquero – defensor, Sergio entonado, más Quiroga y el Loco intratables. Se hilvanaron paredes y jugadas de alto vuelo, con definiciones precisas.
Por el otro lado, los Rojos no se armaron bien en defensa, aunque llegaban constantemente. El partido fue de ida y vuelta, a veces vertiginoso, con salida rápida y buen trato de balón.
Calo y Ariel intentando frenar el tsunami azulado, sin obtener ese objetivo, claro. Fabián de carrilero y Ale S como pieza decisiva en el ataque.
Hubo un gol antológico, Jorge.
¿Cómo que no lo vio? Una salida desde el fondo y en 4 toques (no recuerdo si todos de primera) el gol que seguimos aplaudiendo.
La merecida diferencia se extendió a los 3 goles pero, cuando uno menos lo piensa, irrumpe el factor sorpresivo.
A espaldas del golero azul un muchacho peloteaba a unos chicos. Y si, supongo que nos miraba de reojo y dijo, con estos vejetes me atrevo. Y se atrevió nomás.
Solicitó su lugar, el cual fue concedido por unanimidad, pero debíamos de reordenar las piezas. Juan Pablo se llama. Ajá, lo conoce y dice que es un buen pibe. Generoso usted. ¿Y por qué va a ser? Un tipo de unos 35 años es un buen pibe. Lo dejamos acá.
Cambio de fichas obligado.
Juan Pablo a la escuadra azulada.
En principio pidió el arco para entrar en calor.
Canje de Nono por Fabián y a iniciar un nuevo encuentro.
Entonces la cuestión viró y cambió sustancialmente.
Al hallarnos 5-5, ganó en expectativa e interés la contienda.
Y como usted sabe, el factor psicológico también influyó.
¿Cómo? Ah, ése es Sergio. Sí, airadamente solicitaba otro orden. No estaba desatinado al pensar que los goleros no se reemplazan, pero tampoco sabíamos cómo iba a jugar el tal Juan Pablo
Aquí todo cambió.
Los encuentros Quiroga-Loco mermaron en eficacia y soltura. Su conocido no manyaba del arco para nada. Sergio y Fabián, para qué negarlo, tampoco.
Y apareció un inspiradísimo Nando para salvar las papas en numerosas ocasiones. Ale S, Ariel y el Nono tuvieron sus ráfagas, incisivas por cierto, aunque nunca terminó de armarse el renovado equipo azul.
Los Rojos empezaron a hablar demasiado. El Loco puteaba, la pedía y solicitaba pases al pie. Quiroga intentaba ponerle un bozal a Sergio. Infructuoso el intento, como se habrá dado cuenta.
Luego salió a jugar el quetejedi y lo hizo muy bien. Nunca consolidó el juego colectivo por motivos obvios, pero supo manifestar su vasto oficio en velocidad y en el buen trato del balón.
Este nuevo encuentro fue vibrante. Ariel y Ale S regulaban sus energías en los últimos minutos, se rezagaban y salían con criterio.
Los Rojos, con superioridad técnica, pero sin golero, padecieron cierta falta de convicción para definir, además de levantar notablemente su nivel nuestro Nando.
Sergio estaba ofuscado.
No, disiento Jorge. No siempre se ofusca. El tipo creyó en la levantada sobre el final (su costumbre) y cuando a los Rojos le tocaba salir del medio, parecía un caballo desbocado en busca del Carlos Pellegrini.
Tiene razón: destacamos dos goles de Calo. Y le dio con ganas en ambos casos, es verdad.
También una corajeada de Ariel por un lateral y latigazo sobre el segundo palo.
Una perlita de Ale S al picarla sobre la salida del golero y un puntazo rotundo del Nono sobre el final.
Nuevamente la diferencia de 3 goles, ahora en favor de los Rojos y sanseacabó la jornada.
Dos partidos dos.
Dos situaciones bien diferenciadas.
Sí, tomé nota de las frases lanzadas por Sergio, pero es natural en esta ocasión.
Vayamos a la reseña.
Ah, como se lo anticipé.
Cuando hay más de un partido, lo resuelvo de este modo, así el cronista no labura como un buey.
Sí, lo van a aceptar, no se preocupe.
Vayamos a la cosas por su nombre.
Partidos:
Ariel: Viene arrastrando una sinusitis y un cuadro gripal que no lo abandona. No Jorge, Rexona es un desodorante. El tipo jugó con ímpetu, se ubicó en defensa y le faltó aire en los últimos minutos. Al jugador que me gusssta le falta recuperarse físicamente. Trató bien al balón. Tuvo sus momentos.
6, 90 puntos.
Sergio: El vejete entonado en la primera mitad. Se entendía a la perfección con sus compañeros. Fue el más afectado por la modificación. No obstante, mantuvo su nivel, aunque boqueó de más.
7, 60 puntos.
Fabián: El tiki – tiki lo dejamos como remembranza de otros tiempos, quizá nostálgicos a esta altura. Recio en defensa. Intentó lo que pudo como carrilero. Pudo poco. Hay pelotas a las que no llega por falta de confianza, más que por estado físico. Muchacho que puede dar más.
5, 80 puntos.
Ale S: El tipo se resguarda, regula el aire y luego se anima. Un jugador de ráfagas. Siempre inquietó y supo mandarla a guardar en momentos importantes. Le pedimos mayor colaboración en defensa (a veces).
7, 50 puntos.
Nando: No empezó muy bien y tampoco ayudaba su defensa. De menor a mayor cobró trascendencia su juego y fue un puntal en la segunda contienda. Numerosas tapadas del buen golero. ¡Notables fueron varias! No Jorge, no exagero.
8 puntos.
Juan Pablo: Entró y fue al arco. Evidentemente no es ése su lugar en el mundo. Luego se soltó, quebró la cintura, intentó siempre, creó oportunidades y desequilibró. Se equivocó en defensa cuando el momento pintaba para la remontada. Se agradece su participación. Sí, Jorge. Digaseló nomás.
7, 50 puntos.
Quiroga: Entró endiablado. Toque y meta toque. Pases certeros, cabeza bien levantada, preciso y atreviéndose al arco. Sin decaer su buen juego, en la segunda parte mermó su nivel.
7, 70 puntos.
Loco: De mayor a menor. Dentro de un buen nivel, empezó más activo y participativo. Otro que supo levantar la sabiola. Luego intentó e intentó, pero se quejaba. La pedía y se quejaba. Jugaba y se quejaba. Nunca bajó los brazos y supo alentar a los suyos también. Se topó con la muralla de Nando.
7, 30 puntos.
Nono: Como arquero- jugador se destacó. Ordenó bien su defensa, a pesar del hombre de menos. Luego salió a jugar y defendió con criterio. A la hora de definir, estuvo presente.
7, 70 puntos.
Calo: Su entrega es ejemplar. En principio, sobrepasado por los lanzamientos del rival. De a poco se acomodó, se paró muy bien, interceptó varios remates y cuando se atrevió, querido Jorge, la mandó al fondo de las mallas con sapiencia. Eso, como si supiese.
7, 30 puntos.
Hemos compartido una intensa jornada.
Reitero la tarjeta ROJA FURIOSA para Carlos Catella.
Eso no se hace y lisssto.
Evocamos momentos de muy buen juego.
Si algunos hicieran la pausa necesaria, todos ascenderíamos en el nivel de juego.
Como sea, fue una aleccionadora ocasión para el fulbo.
Ahora las recomendaciones semanales:
Film: “Baraka” (documental).
Libro: “Los adioses”, de Juan Carlos Onetti.
Música: Hay que nombrar los clásicos, Jorge. “The Wall”, de Pink Floyd.
Fuerte abrazo para todos y a sufragar con conciencia cívica el próximo domingo 14 de agosto.
¿Qué dice?
Sí, también para Carlos Catella.
No, éste lo paga usted también. Y se agradece.
En la próxima lo invito.
Será en San Telmo.
Autor: Nono.
