lunes, 12 de agosto de 2013

"Confesiones de invierno"


“Fue tiempo de soñar y, sin embargo,
            estaban ya las cartas repartidas.”

            Luis García Montero

 

            Nuevamente aquí, don George, atento a los dichos que han circulado en minutos con estas Primarias, con las tetas de la Donda, las figuritas repetidas en Michetti y Filmus, algo que llaman UNEN entre Pino y Carrió, el incipiente despegue de Massa, un cambalache de interpretaciones y malentendidos en este país que es bien NUESTRO.

            Quiere que vaya a las acciones, entonces no me distraiga. Progresistas mareados, gorilines de derecha católica que apoyan a un Rabino, izquierdistas separados hasta el hartazgo, Scioli que no sabemos hacia dónde disparará, conjeturas al por mayor y un doparti distinto. ¿Vio? Y sí, uno va al grano y se encuentra con 13 participantes.

            Sí Jorge, dije 13. Recibimos la visita de Mariano Estrach y su hijo. Regresó el pequeño representante de la provincia tucumana en Luciano y se unió uno de los Márquez, nuestro Maxi.

            Mire, son sólo Primarias y en octubre veremos cómo quedan conformadas las Cámaras. Déjese de joder. ¡Viva Perón! –grita el susodicho. ¿Quién lo entiende?

            En fin, armamos un 6-6 al tún tún. Nono y Pedro a las vallas y se lanzó un interesante rojos contra azules.

            A pesar del kilombo y del alto tránsito, se pudo jugar con menos juego trabado del que esperábamos.

            En los rojos destacamos el alto nivel exhibido por Javier. Notable en los anticipos, la marca y la proyección. Atrás un seguro Nono, bien secundado por Camilo y Sergio en cada banda. De medio juego hacia adelante los altibajos del Loco y Mariano, quienes supieron desnivelar cuando se conocieron y se atrevieron a definir.

            Por el otro lado a Pedrito me lo dejaban solo, una costumbre, al enredarse Maxi y Fabián en la salida. Destacamos la habilidad y el amplio concepto asociativo de Luciano, sostenido por Quiroga (le tocó bailar en la más fea para su juego bonito) y un desconocido Serghino, quien jamás encontró su lugar en el mundo. Durante 8 minutos fue reemplazado por Manuel, el hijo de Mariano Estrach.

            Fue un cotejo parejo, aunque los rojos supieron lanzar sus ráfagas en los momentos oportunos y llegar a sacar una diferencia lapidaria de 4 goles cerca del final.

             Evocamos un  golazo a puro empuje de don Boggio, otro cabezazo a lo Mario Boyé de Mariano (sin boina, claro) y una peinada del Loco tras centro de arco a arco.

            También queda en la retina un gol anulado a Boggio (por llevarse el balón con una mano), quien reaccionó con desmesura y vociferó a los 4 puntos cardinales.

            Mariano lo fajó de lo lindo a Luciano en 3 oportunidades. De no creer. Pudo haber sido expulsado en dos oportunidades.

            Luego vimos algunos intentos con buen pie, balón dominado y jugado al ras, fuerza en las marcas y presión sobre los carrileros de turno.

            Muy buena faena de los goleros, aunque haya sido mayor el laburo de Pedrito, claro.

            En definitiva una diferencia justa de 3 para los rojos que picaron en punta y nunca vieron comprometida su victoria.

            Reseña individual a pedido:

           

            Azules:

            Pedro: Mucho trabajo y buen laburo con los pies. Muy seguro don Pedro.

            7, 80 puntos.

            Maxi: El Márquez anduvo enredado. Puso garra y coraje. Falta serenarse y levantar la testa. Se puede…

            6, 30 puntos.

            Luciano: De lo mejorcito. Hábil y despierto. Buenos quiebres de cintura y astuto en velocidad. A tenerlo en cuenta.

            7, 80 puntos.

            Fabián: En todas las divididas. Por su sector se mandaban de a tres y el tipo quedaba pagando. Intentó siempre y sudó la casaca. Buscó claridad y faltó poner orden. Irregular su tarea.

            6, 30 puntos.

            Serghino: Desconocido. Nunca se asentó y se la pasó corriendo por todos los sectores. La buscó siempre y estaba rodeado. ¡Falta largarla antes, Serghino!

            5, 80 puntos.

            Quiroga: El dueño del medio tuvo que lidiar con la falta de espacio y esto ha medrado sobre su nivel de juego. Con 12 miembros no se puede seguir en la calesita. Voluntad de sobra y acertados anticipos. Momentos y chispazos esporádicos. Tampoco lo entendieron, seamos sinceros. Eso se lo dice usted, Jorge.

            7, 50 puntos.

 

            Rojos:

            Nono: Un hombre más en la salida. Atajó lo poco que le tiraron y respondió. Atento.

            7, 10 puntos.

            Camilo: Un zaguero con seguridad en la marca y buen ojo en la proyección.

            7, 40 puntos.

            Sergio: Ha repuntado. Mañozo, con incesante búsqueda por el lateral izquierdo, tiempista nato que sabe cuándo debe y cuándo no debe mandarse. Se desmarca y llega. Muy activo.

            7,20 puntos.

            Javier: Un destacado. Notable en la marca y la presión sobre el avance rival. Supo detenerse y pensar y distribuir el juego. Tremenda su actividad. Premio Chamigo.

            8 puntos.

            Loco: Irregular. Fue el goleador y por momentos se lució, pero le exigimos mayor precisión a la hora de definir. Se perdió muchos goles. Algunos hechos. No obstante, asistió y levantó si cabezota. No se lo oyó gritar y chillar tanto. Epa…

            7 puntos.

            Mariano: Le costó entrar en ritmo. Lo putearon por sus taquitos inoportunos y se prendió en la segunda mitad. Autor de un golazo de sabiola. Una de cal y otra de arena. Mejoró sobre el final.

            6, 90 puntos.

 

            Una jornada bien frappé, con buena disposición y mejor ánimo. Se notaba a los muchachos sueltos y risueños.

            Vayamos a las recomendaciones semanales:

            Cine: “Woody Allen, el documental”

            Libro: “La amante de Bolzano” de Sandor Marai.

            Música: “Concierto de piano N° 1” de Chopin.

           

            Dije bien frappé, George. De vez en cuando nos mandamos la parte.

            Fuerte abrazo a cada uno.

            Autor: Nono.