lunes, 21 de febrero de 2011

"Celebración"


El fútbol tiene eso, mis queridos, eso que nunca podrá ser explicado, ni narrado, ni comprendido. El factor imprevisible, la situación anómala, perpleja o inesperada. Un domingo cualquiera del mes de febrero, en plena pretemporada, los muchachos reunieron sus cuerpos y su espíritu para brindarse a los menesteres del balompié.
A última hora del día un Simón desesperado pidió ser convocado (de ventana a ventana) y se armó un 5-6 conocido.
Y allí fuimos.
Azules con 5 y rojos con 6.
Casi me olvidaba, por la tardanza de Nico (tarjeta amarilla) empezamos a movernos con un breve picadito.
La presencia de Pedrito y Jorge auguraba árbitro y juez de línea: no fue así.
En pocas palabras podemos decir que lo que nació parejo y muy equilibrado (durante 15 minutos) se tornó dominante y de elevado nivel para una escuadra: la roja.
La escuadra favorecida con el hombre de más supo destacarse, tomar ventaja y sacarle todo el provecho. Se destaparon Sergio y Fabián, señores. ¡Y cómo! Alta gama de juego en ambos jugadores. Enganche, quiebre de cintura (acá lo dejamos de lado a Fabián por motivos obvios), toques, notables definiciones, prestancia y entrega.
Nico está recordando sus mejores tiempos, Nando estuvo seguro y Rodrigo le pudo en el duelo de jóvenes a un irreconocible Simón.
Por la escuadra Azul, Nono, Quiroga y Ale S fueron los puntales. Carlitos luchó con su garra habitual y un desconocido Simón se enmarañaba en su propia red de deseos incumplidos. A veces la ansiedad te juega en contra, pibe, gritaban desde la tribuna.
Así los Rojos fueron sumando y sumando paulatinamente, gol a gol, hasta llegar a la decena.
Debemos decir que cuando la diferencia se estiró a 5 o 6 goles, algunos muchachos azules bajaron la guardia y no pusieron el mismo empeño.
Una atípica jornada en la que destacamos la irrupción de aquellos que le pusieron lustre y notas de color a una victoria amplia e inobjetable.
Tanto es así, que cuando había principio de acuerdo para reiniciar de cero en los últimos 10 minutos, un corte de luz fue el broche de oro al concepto inesperado y sanseacabó.
Celebramos la producción global y devastadora de la escuadra triunfante.
A la reseña:

Azules:
Nono: Hizo lo que pudo ante los bombardeos y llegadas de 2-1 y hasta 3-1 de los rojos. Efectivo en la salida y tapó varias. En el final, absorbido por la atmósfera azulada, cometió un error en la salida y le regaló un tanto al rival.
6 puntos.

Carlitos: Tb cometió un error garrafal, pero las luchó siempre y puso el alma. Nunca se entregó. Gran temple ante la adversidad.
6, 80 puntos.

Quiroga: A pesar de todo, trató de tomar la rienda en la mitad de la cancha, desarrollar su juego bonito y asistir. No desentonó. Tampoco brilló.
7 puntos.

Ale S: Tuvo sus ráfagas, algunas las aprovechó, supo replegarse cuando lo ameritaba y nunca bajó los brazos.
7 puntos.

Simón: Ay, Simón. ¿Quién fue el personaje que estuvo por la tarde en Ocampo? Irreconocible. Enredado con el balón, falto de ideas y se vio inmerso en los terrenos que minaban las piernas rojas. No levantó la sabiola y tampoco definió cuando podía. Una tarde para el olvido.
4 puntos.


Rojos:

Nando: Muy buena faena del golero y por algunos minutos jugador. Regular, mesurado y equilibrado.
8 puntos.

Fabián: Bien en defensa y notable en la proyección. Varios goles memorables y buen sentido para desmarcarse. ¡Partidazo! Más allá del tiki-tiki y más acá de la esencia del fobal.
9 puntos.

Sergio: El vejete, si no me equivoco, jugó su mejor partido de la era Ocampo. Confiado, seguro, con quiebres, enganches, capacidad de definición y buena asistencia. ¡Notable!
9 puntos.

Ariel: El muchacho llegó de vacaciones, se notaba. Tipo inteligente: se ubicó atrás y como salida. Nunca se movió y jugó parado. No desentonó en el arco. Ya bajará algunos kilitos, y volverá su magia.
6 puntos.

Rodrigo: El pibe maravilla, sin lucir, jugó un buen partido. Faltó capacidad de asistencia. Acertado a la hora de definir.
7, 30 puntos.

Nico: En este caso, la magia quiere y puede volver. Se lo nota más delgado, más ágil y lúcido. Algún enganche de más, pero levantando la cabeza y haciendo jugar al equipo. Va p’a arriba este muchacho.
7, 70 puntos.


Celebramos la jornada.
Destacamos el oficio de dos jugadores que le pusieron brillo al domingo.
Aguardamos el regreso de Pedro y el cronista se despide con las recomendaciones semanales.
Fuerte abrazo.

Recomendaciones:

Film: “The figther” (“El Ganador” en salas porteñas)
Libro: Lo que encuentren de Harold Pinter (gran dramaturgo británico)
Música: “For export”, de Aníbal Troilo. (disculpen el título, pero el CD es memorable).

Autor: Nono.