Los muchachos llegaron relajados y distendidos al cabo de la laboriosa victoria ante los mexicanos, aunque todos sabemos que debemos recuperar el nivel de juego para el sábado próximo (que será un partido muy distinto).
De entrada nos encontramos con dos novedades: la continuidad de la polémica bola del Mundial y el regreso, después de 4 años afuera de las canchas, de nuestro benemérito Nico.
La cuestión fue el armado de un 5-6.
Si el cronista se hubiese percatado al instante que había uno menos, hubiese chillado por la inclusión de Quiroga en el equipo beneficiado. No obstante, surgió un muy buen partido, parejo en todo su desarrollo, pese a la velocidad y el rebote de la Jabulami.
Los Azules con 6 y los Rojos con 5.
Fue incesante el cambio del score a favor de un bando y del otro, con ráfagas de juego pensado, triangulado, levantando la sabiola, armando furibundos contragolpes, con definiciones certeras, pases medidos, piernas fuertes y sin brusquedad, excelente predisposición de ánimo y momentos de brillantez.
Los Azules eran más incisivos, agresivos y supieron sacar ventaja del hombre de más.
Los Rojos jugaron en equipo, la hicieron circular y se mostraron más compactos.
Destacamos la capacidad goleadora de Ale S, la entrega de nuestro Carlitos y de Quiroga, la forma de cuidar el balón y buscar siempre la pared en el Loco Smith, el NOTABLE desempeño global de Sergio, con goles de magnífica factura, la parsimonia de Cha-ly antes de abrir el juego, lo mismo por el lado de Martín (en la vereda de enfrente), las regulares actuaciones de los goleros y la concentración de todos a la hora de hilvanar jugadas con criterio.
El cronista no ha hecho buenas migas con el balón pero, como dijo el Comandante, nos iremos adaptando. Y las señales han surgido.
Evocamos un gol de Ale S mientras se sacaba marcas de encima y la cruzó al segundo palo con violencia, otro de Sergio en la cual, al cabo de varios pases, la puso con 3 dedos en un ángulo superior (con aliento de Nando) y una escapada final del Nono, quien superaba marcas en velocidad y luego la cruzó al segundo palo.
Fue victoria final de los Azules por la mínima diferencia en un partido vibrante, equilibrado y de final abierto.
Hemos mejorado en la concepción del juego y hacemos lo que podemos con la liviandad del balón, que seguramente tendrá vigencia hasta la finalización del Mundial.
Luego quien sabe…
A la reseña, muchachos.
Azules:
Nando: Sobrio, de pocas palabras, las necesarias, y efectivo. Un hombre apocado que ha demostrado seguridad y regularidad. ¿Irreconocible? No, con semblante de flamante padre. 7 puntos.
La cuestión fue el armado de un 5-6.
Si el cronista se hubiese percatado al instante que había uno menos, hubiese chillado por la inclusión de Quiroga en el equipo beneficiado. No obstante, surgió un muy buen partido, parejo en todo su desarrollo, pese a la velocidad y el rebote de la Jabulami.
Los Azules con 6 y los Rojos con 5.
Fue incesante el cambio del score a favor de un bando y del otro, con ráfagas de juego pensado, triangulado, levantando la sabiola, armando furibundos contragolpes, con definiciones certeras, pases medidos, piernas fuertes y sin brusquedad, excelente predisposición de ánimo y momentos de brillantez.
Los Azules eran más incisivos, agresivos y supieron sacar ventaja del hombre de más.
Los Rojos jugaron en equipo, la hicieron circular y se mostraron más compactos.
Destacamos la capacidad goleadora de Ale S, la entrega de nuestro Carlitos y de Quiroga, la forma de cuidar el balón y buscar siempre la pared en el Loco Smith, el NOTABLE desempeño global de Sergio, con goles de magnífica factura, la parsimonia de Cha-ly antes de abrir el juego, lo mismo por el lado de Martín (en la vereda de enfrente), las regulares actuaciones de los goleros y la concentración de todos a la hora de hilvanar jugadas con criterio.
El cronista no ha hecho buenas migas con el balón pero, como dijo el Comandante, nos iremos adaptando. Y las señales han surgido.
Evocamos un gol de Ale S mientras se sacaba marcas de encima y la cruzó al segundo palo con violencia, otro de Sergio en la cual, al cabo de varios pases, la puso con 3 dedos en un ángulo superior (con aliento de Nando) y una escapada final del Nono, quien superaba marcas en velocidad y luego la cruzó al segundo palo.
Fue victoria final de los Azules por la mínima diferencia en un partido vibrante, equilibrado y de final abierto.
Hemos mejorado en la concepción del juego y hacemos lo que podemos con la liviandad del balón, que seguramente tendrá vigencia hasta la finalización del Mundial.
Luego quien sabe…
A la reseña, muchachos.
Azules:
Nando: Sobrio, de pocas palabras, las necesarias, y efectivo. Un hombre apocado que ha demostrado seguridad y regularidad. ¿Irreconocible? No, con semblante de flamante padre. 7 puntos.
Calo: La saeta se vio desbordado por los incesantes cambios de frente del rival. Tampoco desentonó, ya que no la arriesgaba. Entró poco en juego. 6 puntos.
Cha-ly: El muchacho que me gusssta…Y lo hizo bien. Manejó los hilos desde abajo con buen tino y, cuando pudo, se atrevió. 7, 20 puntos.
Quiroga: Alentamos su entrega e intento de juego bonito. No obstante, creo que es el más afectado por el cambio del balón. A la hora de mandarla a guardar, no dudó y lo hizo realmente bien. 7, 50 puntos.
Ale S: El goleador en su salsa. Desbordes por aquí y por allá, búsqueda del hombre libre para buscar la pared y muy buenas definiciones. ¿Qué más se le puede pedir? 8 puntos.
Nico: Ausente desde el Mundial de Alemania. Entonces lo retiraron de Ocampo con una fractura. Al poco tiempo se casó y desapareció por 4 años. Celebramos su regreso. Como era de esperarse, le costó muchísimo orientarse y entrar en juego. El hombre en cuestión no perdió su olfato goleador e hizo la gran Palermo a pocos minutos del final. ¡¡Avanti, Nico!! 5, 66 puntos.
Rojos:
Nono: Lo zarandearon de lo lindo. Logró tapar algunos mano a mano, anticipar y salir jugando. Sobre el final, hizo un golazo con su sello. 7, 40 puntos.
Carlitos: Ventilete llegó engripado. Sin embargo, fue encomiable su despliegue, su juego y su capacidad de definir en la primera mitad. Luego sintió el esfuerzo, pero no desentonó. 7, 30 puntos.
Martín: El último hombre puso orden y buen juego. Luego se resintió y quedó en una gamba. Logró asistencias de lujo. 7, 40 puntos.
Sergio: Premio Chamigo al vejete. Las hizo todas, tanto en defensa como en salida desde un lateral, con toques, asistencias y certeras definiciones. Subió y bajó lo que pudo. Notable lo suyo y el efecto de la pastilla azul. Eso sí: ha mejorado la línea estética de la vestimenta; de sodero pasó a gremialista del comercio. 8, 30 puntos.
Loco Smith: El delantero hizo mucho trabajo de aguante con el balón. Supo sostenerla, girar y buscar al compañero desmarcado. Se quejó acerca del adelantamiento de sus compañeros cuando los Rojos ganaban por la mínima diferencia e iban a buscar más. 7, 30 puntos.
Estimados gladiadores, hemos dejado una buena impresión, apoyamos el regreso a la gramilla del anestesista y le damos unos créditos a la bola que trajo el Comandante.
Destacamos el caudal de juego y alentamos el fair-play.
A tu pesar, Jorge, en la próxima ocasión no llegaremos cabizbajos. Confío en un gran partido con los alemanes y una durísima clasificación a semis de la celeste y blanca.
Fortísimo abrazo a cada uno y un placer reseñar nuestras limitaciones.
Autor: Nono
