lunes, 23 de noviembre de 2009

"Walking on the moon"

Es jodido escribir una crónica en esta oportunidad.
De veras, muchachos...
Uno busca inspiración en este tema de Police, en la tonalidad de los jacarandáes, en la inminente paternidad de Quiroga, en la goleada de Boquita, o en la relajación de los participantes del doparti de este domingo.
Para empezar, nos cagó Cha-lyyy (con lo que me gusssta como juega este muchacho...).
Luego empezó la tanda de los viejitos lesionados.
Y vienen en fila: Ale S, Ale Quiroga, Loco Smith.
¡Luego se nos lesiona nuestro Pedrito! Para colmo me lo mandan al arco (menos mal que fueron unos pocos minutos).
Nos llega en estado de resaca la liebre coreana.
¿Entonces?
Entonces se lanza un conocido 4-5.
Queridos lectores: parecía un picado de viejitos de 60, donde lo único que luce es la ley de la gravedad.
Y bue...el esférico se puso a rodar y la cosa se puso en juego.
A menos de media máquina los azules sacaron un rotunda ventaja que llegó a los 7 goles. Para los desatentos, los azules eran 4.
¿Qué pasaba?
Una extraña conspiración del destino quiso que todos los rebotes fuesen favorables. Tb colaboró la inexistente defensa roja, al igual que la escasa capacidad de mandarla a guardar por parte de los mismos.
En unos 18 minutos la cosa daba para el cambio de equipo, ya que se produjo la lesión de Pedro (se la dieron en los testículos y en un tobillo en un mismo combo).
Pedro bajo los tres palos y Nando a jugar.
Fueron pocos minutos, pero los suficientes para que este golero marcase un bonito gol junto al palo.
Walkin’ on the moon...
Hoy no hubieron gladiadores, muchachos.
Hubo un rejuntado de buenos propósitos que se fueron diluyendo como nuestras energías en muy pocos minutos.
Menos mal que loa azules ya caminaban de verdad y los rojos tuvieron algún rapto de memoria para pensar que en el balón-pie la suma es con goles en el arco contrario.
Todos a un cuarto de máquina (y soy generoso), pero con el incentivo anímico de la reacción roja.
Y la cosa se puso a tiro: apenas a 2 goles del empate.
Aprovecharon el espacio libre, el jugador de más y el recuerdo de meterla en el arco de enfrente bajo la súplica de Nando.
Finalmente, con el tanque casi vacío, pero algún resquicio técnico, los azules metieron presión y la cosa finalizó en diferencia de 4.
Podemos decir que se destacó el golero azul en varios mano a mano y una corrida de arco a arco con gol inaugural.
Destacamos la fuerza de la liebre coreana, la regularidad del golero rojo (una cagadita, pero fue mínima), la polenta física de Ale S (cuando su cuerpo lo dejaba coordinar), la función de lanzador del Loco, la entrega de Quiroga (con lo que podía, aunque regresó a la horizontalidad), el tesón de Pedro...
Walkin’ on the moon...
Y ése fue el registro de un olvidable doparti que nos aproxima cada día al BRILLANTE y AUSPICIOSO bicentenario.
Sí muchachos, hubieron cositas vistosas, algunos lindos golcitos, alguito de buenas intenciones y mejor dejarla acá.
Abrevamos una máxima de Calo, quien afirmó con convicción que esta tarde lo pasaba caminando hasta Jorge.
No sólo a vos te pasaba Jorge esta tarde, querido Calo, quedate tranquilo.
Mientras suena Walkin...on the moon, nos atreveremos a calificar:


Rojos:

Nando: Fue vapuleado en los primeros minutos, pero sin verdadera responsabilidad. Ha recuperado regularidad y suele salir a joder (y lo hace).
6, 80 puntos.


Calo: Parece ser que hasta los astronautas se le animaban a la saeta.
Hizo lo que pudo y fue poco.
A veces se proyectó y logró llevar algún peligro.
5, 80 puntos.


Martín: El jugador fino juega cuando quiere.
Hoy, con alguna dificultad, se lanzó, metió, trató de cuidar el balón y la sacudió con ganas (pero se iban por arriba).
¿Defender? Walkin’ on the moon...
6, 50 puntos.


Pedro: Este muchacho llega a fin de año con lo que puede.
Le pone garra, se lesiona, pero sigue...
Se perdió un gol increíble (hoy nada, en verdad, lo fue...), pero se proyectó cada vez que pudo.
Atenti: estuvo solo en varias ocasiones desperdiciadas por el pase que no llegó.
Se transpiró todo.
6, 30 puntos.


Ale Q: En una gamba y media se puso la casaca y el equipo al hombro.
Como de costumbre, estuvo en numerosas pelotas divididas.
¿Le dieron? Sí, en alguna.
Tb intentó cuidar la pelota y pasarla y gambetear a su propia sombra, pero abusó del concepto ligado a la horizontalidad.
Hizo bonitos goles (cuando se acordaba de patear al arco).
7 puntos.




Azules:

Nono: Tapó varios encuentros a solas, se atrevió a pasear hasta el arco contrario y fue salida del equipo.
7, 40 puntos.


Loco Smith: En una gamba.
¿Y qué hizo? Fue lanzador (no desentonó), llegó en algunas (pocas) y se resguardó atrás para defender.
7 puntos.


Sebastián: Se había bebido todo la noche y madrugada del día anterior.
Metió pierna, las peleó, la fortuna lo ayudó en un gol digno del Arte Marcial y dijo en el tercer tiempo que apenas entendía el castellano.
Se notó.
6, 80 puntos.


Ale S: En una gamba.
Cuando se animó lo hizo muy bien.
Luego se tomaba sus descansos y nuevamente arremetía.
Hizo varios goles (algunos bonitos tb).
7, 40 puntos.




Que la conclusión la saquen los otros.
En algún momento parecía un cotejo jugado en el límite de lo inverosímil.
¿Raro?
No, flojito y con baja presión arterial.
Por momentos creí que algunos podían levitar (walkin’ on the moon), pero el bendito balón-pie siempre ofrecerá nuevas oportunidades.
Me despido con Sting cantando en su versión cámara lenta.
¡Fuerte abrazo!

Autor: Nono