miércoles, 12 de enero de 2011

"12 son suficientes"

Inusual comienzo de la temporada 2011 en Ocampo.

De la escasez del viernes pasamos a la superpoblación del domingo.

A pesar de la multitud de piernas, el partido fue entretenido y emotivo.

El combinado reforzado de Hughes (provincia de Santa Fe) consiguió una agónica y festejada victoria sobre Arquitectura, tras remontar en los últimos minutos una desventaja de tres goles.

Los Hughes dominaron al comienzo del partido, merced a las efectivas combinaciones de la familia López. Una ventaja de dos goles que se mantuvo, con oscilaciones, durante la primera mitad.

Sin embargo, inspirados tal vez en la conducta del intendente municipal – que cobró notoriedad por jugarse los sueldos del personal en el casino -- Hughes rifó en cuestión de minutos la ventaja que había construido con paciencia.

Se afirmó Arquitectura, presionando bien sobre la defensa del equipo rojo que, además de cometer gruesos errores en la salida, se mostró impreciso a la hora de definir, posibilitando el lucimiento del Nono.

Aprovechando la generosidad del rival, Arquitectura dio vuelta el partido y llegó a sacar una ventaja de tres goles que mantuvo hasta casi el final. Por momentos, daba la sensación de partido definido.

En los minutos finales y tras cambiar el aire, los López afinaron la puntería.

Fue fundamental el aporte de Ale Soria a la remontada, que contribuyó con su garra habitual y un par de corridas decisivas a concretar la reacción agónica.

Párrafo aparte para Jorge, que coronó su regreso al caucho de Ocampo con un sutil toque para darle el triunfo a Hughes segundos antes de la chicharra.



HUGHES



Nando: 7, 5 puntos. Muy buen trabajo en el arco, opacado por dos o tres pases infantiles que culminaron en goles del rival. “Si no desmarcan, qué quieren que haga,” vociferó ofuscado.



Calo: 5 puntos. Aceptable tarea defensiva. Flojo en la salida, sumó su propia cuota de asistencias a los delanteros rivales, que sí se desmarcaban.



Manuel: 8 puntos. Muy buena tarea. Inesperado goleador al comienzo del partido. Cuando se le corrió el arco, bajó a la defensa y tapó agujeros de todos los tamaños.



Alejandro: 7,5 puntos. Empezó ordenado en la defensa, haciendo de salida y llegando bien al ataque. En la segunda parte se desordenó y bajó el nivel, pero fue decisivo adelante por su aporte goleador.



Jorge: 7,5 puntos. Se lo vio fuera de punto en las primeras jugadas. Fue tomando el ritmo y se lució con un par de definiciones de antología (la última, sobre la chicharra, para darle la victoria a su equipo) y, obviamente, algún lujo de más, como siempre.



Ale Soria: 8,5 puntos. El corazón del equipo. Su peso fue creciendo con los minutos y fue decisivo en los minutos, cuando quedaban pocas piernas y muchos goles por remontar.



ARQUITECTURA



Nono: 7,5 puntos. El tipo juega mucho con el balero y cuando hay jugadores nuevos tarda unos minutos en sacarles la ficha. Cuando cargó los datos en la computadora, empezó a sacar todo y fue fundamental en la levantada de su equipo.



Martín: 7 puntos. Algo perdido entre tantos jugadores. Al amigo no le gustan los 6 contra 6 y se le nota. De todas maneras, contribuyó con la salida clara, lo que se hizo particularmente evidente frente a las fallas del rival en ese aspecto.



Sergio: 6,5 puntos. Un sorbito de Pepsi por aquí. Un masaje en la rodilla por allá. Una clase de cómo enfríar el partido e irritar a los contrarios que llenaría de orgullo a Lacan y al Dr. Bilardo, de manera indistinta. Rendimiento parejo y el fervor de siempre. El gol agónico de López lo dejó sin tiempo para deprimirse. No faltará oportunidad.



Quiroga: 7,5 puntos. Funcionó como conductor de su equipo y fue responsable de sus mejores momentos. No se lo vio a gusto con el Bilardismo extremo de algún coequiper.



Ariel: 6 puntos. Tuvo menos peso que en otros partidos. Aportó su cuota habitual de gol pero se quedó sin piernas acusando, según propia confesión, los excesos de fin de año.



Andrés: 6,5 puntos. Con mucha dinámica y mucha movilidad. Le faltó un poco de claridad para aprovechar varias situaciones favorables que no terminó de redondear.



Faltaron los espacios y el aire. Sobraron los errores y el pan dulce, pero para ser enero no estuvo mal.

Citando a un filósofo contemporáneo: “Que nunca te falte, querido!!”
Autor: Calo